lunes, 8 de diciembre de 2014

Día Internacional de D.D. H.H., en México...

10 de diciembre
Día Internacional de los Derechos Humanos
… en México nada que celebrar!


Organizaciones populares, de derechos humanos, pueblos indígenas y campesinos, movimientos sociales y personas en lo individual  a lo largo y ancho del país hemos decidido manifestar nuestra profunda indignación por la delicada situación en materia de derechos humanos que hoy sufre nuestro país en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos.

Hace más de 50 años se instauró el 10 de diciembre como fecha simbólica para llamar la atención de los pueblos del mundo sobre la Declaración Universal de Derechos Humanos como un ideal común a todas las naciones. Sin embargo es nuestra intención movilizarnos pacíficamente en esta fecha simbólica para subrayar la precaria protección de Derechos Humanos que realiza el Estado Mexicano.

Los hermanos normalistas de Ayotzinapa son una muestra dolorosa e indignante de las miles y miles de violaciones de derechos humanos que ocurren en nuestra patria. Detenciones arbitrarias; torturas; feminicidios; despojos de tierras y territorios; presxs políticxs y de conciencia; asesinatos de liderazgos sociales; imposición de megaproyectos; falta de consulta libre previa e informada a pueblos indígenas; ausencia de dignidad en el trabajo, falta de acceso a la salud y la educación; amenazas, agresiones, persecuciones a personas defensoras y periodistas; son apenas ejemplos de una situación que ha llegado a un límite insoportable para amplios sectores de la sociedad mexicana.       

Dado lo anterior es que llamamos a todas las personas dignas a cuyos ojos y oídos lleguen estas palabras  a realizar una acción de protesta y de manifestación en la medida de las posibilidades de cada organización, pueblo, movimiento, frente etc. elevando cada una de las luchas y reivindicaciones que hacen de los derechos humanos una herramienta al servicio de la dignidad y liberación de los pueblos.   
Que el 10 de diciembre se convierta en un día de movilización pacífica que le diga al mundo que en México no hay nada que celebrar.

Red Nacional de Resistencia Civil.

Carta a EPN desde Chile.




Hoy, revisando la prensa internacional me encontré con sus desafortunadas declaraciones, pidiendo al pueblo Mexicano superar el dolor en Ayotzinapa. ¿Qué significa eso señor presidente?, ¿Acaso usted está diciendo que se les eche al olvido a los 43 estudiantes desaparecidos en su régimen de Terrorismo de Estado?


Me dirijo desde Chile, para repudiar sus palabras. ¿Se puede tener el coraje para decirle a esa madre, a ese padre, a ese familiar, a ese amigo, y a todo un pueblo que exige justicia que superen el dolor?

En Latinoamérica, países como Uruguay, Argentina, o Chile, si sabemos de dolores. Por ejemplo, en mi país Chile, han transcurrido 41 años desde que se instaló a golpe de metralla una dictadura sangrienta que acabó con la vida de más de 3.500 personas, entre ellos mujeres, ancianos y niños. Han transcurrido 41 años y sin embargo, en términos de justicia se ha avanzado poco y nada.

Señor presidente Peña Nieto, en Chile, los ejemplos de lucha en la búsqueda de sus seres queridos son miles. Le voy a presentar a Victoria Saavedra, en esta foto, ella busca en el desierto de Atacama los restos de su hermano José, ejecutado en la  Caravana de la Muerte en 1973, en la ciudad de Antofagasta.

Por favor, señor presidente. Mire bien ésta imagen y hágase la siguiente pregunta: ¿Sería capaz de decirle a Victoria, mirándola a los ojos que “eche al olvido” a su hermano José?.

Para marcar el terreno donde ya estuvo, Victoria debe enterrar en el desierto una bandera chilena junto con el rostro de su hermano el lugar que ya recorrió, para seguir buscando y así, no volver a explorar en el mismo lugar. Lo que ha vivido Victoria es horrible, porque además de tener que soportar la indiferencia de una justicia chilena que protege a los ejecutores del asesinato de su hermano, también debe cargar con el dolor y la pena que arrastra todo un pueblo. Las heridas no cicatrizan, están abiertas y sangrantes.