jueves, 26 de junio de 2014

Millones de hectáreas quedarán muertas: CAP

 

La ley de hidrocarburos provocará que millones de hectáreas que ahora son de agricultura o reservas ecológicas se conviertan en tierras muertas, debido a la explotación en calidad de préstamo que efectuarán trasnacionales dedicadas a energía y minería.
El coordinador general del Congreso Agrario Permanente (CAP), José Durán Vera, aseguró que si el procurador fiscal de la Federación, Javier Laynez Potisek, asegura que las leyes sobre hidrocarburos aprobadas en el Senado no provocarán “expropiaciones de facto de tierra ejidal ni comunal para entregarla a inversionistas privados nacionales o extranjeros”, se debe a que a las empresas petroleras no desean comprar las tierras, porque podrán hacerse de ellas por el esquema de adopción del dominio pleno.
A la industria extranjera tampoco le interesa la expropiación que implica el convenio de ocupación previa y el pago de indemnizaciones, ya que se les provee de la figura de contratos de ocupación, que al realizarse por negociación directa, resulta conculcatorio del derecho de asesoría, dijo.
Apuntó que, según Laynez, no es interés de las trasnacionales, después de conseguir un permiso de exploración, explotación y extracción de hidrocarburos, comprar la tierra superficial, lo que es lógico porque después de 30 o 40 años de explotación (...) no sabrán qué hacer con las tierras muertas.
Eso es, dijo, porque serán tierras inservibles para actividades productivas y, sin duda, no volverán a servir para sembrar productos alimenticios.
¿Qué patrimonio quedará a los dueños de la tierra cuando ya no haya riqueza petrolera en el subsuelo y la contaminación y destrucción de la superficie sea evidente y no rentable?, cuestionó.
Expuso que la visión de estos funcionarios no contempla el aprovechamiento de la riqueza natural para el desarrollo de las regiones; pareciera que sólo les importan las migajas en forma de prebendas que les tirarán al suelo las empresas trasnacionales si logran aprobar las leyes reglamentarias que sólo favorecen a los supuestos inversionistas.

Rompen el silencio mujeres de Atenco


Las 11 mujeres denunciantes de tortura sexual en San Salvador Atenco, estado de México, quienes hace un mes iniciaron la campaña Rompiendo el silencio, dieron a conocer el caso de Belinda Garza Melo, quien hace siete años fue víctima de vejaciones físicas, sexuales y sicológicas por parte de elementos de la entonces Policía Federal Preventiva (PFP) en Torreón, Coahuila, y poco después fue presentada como ‘‘integrante’’ del cártel del Golfo.

Recordaron que Belinda Garza se encuentra presa en el penal de Tepic, acusada de forma injusta de delincuencia organizada, ilícitos contra la salud y secuestro, sin que a la fecha se le haya dictado sentencia.